Mira:
Es la cara de un gusano de seda.
El gusano estaba vivo. Esa cara digamos que ya le venía pequeña.
Y la tiró por ahí.
La encontré de casualidad. No sabía que los gusanos mudaban la cara también. Ví una cosa rara, pequeñita y la puse en mi danioscopio.
Esa foto sale en el cuento de Bombyx, el gusano de seda
De hecho salen muchísimas fotos que hice el año pasado.
Todas mías, originales.
Las hice después de estar dos meses criando gusanos e investigando como una loca. Leyendo un montón de bibliografía, contrastando cada cosa que leía, fascinándome con la historia de como un simple gusano unió oriente y occidente, muchíiiiisimo tiempo antes de que llegara internet y la globalización, haciendo timelapses de cómo los gusanos hacían los capullos, dándole mil vueltas de cómo explicar eso a l@s más pequeñ@s…
Todo Villapez se llenó de gusanos de 4 razas diferentes, blancos, cebrados, transparentes, salvajes…
Mis danios estaban celosos, lo sé.
En fin, te diría que me costó mucho trabajo, pero mentiría. No me costó nada, fue una cosa tan chula que me atrapaba. Podía estar horas y horas… ¿Tú sabes cuando estás fascinad@ por algo que el tiempo no pasa?
Para compartir esa sensación y todo lo que aprendí, traduje lo que veía en un formato curso. Y este año he hecho el cuento.
Por ejemplo, en el módulo 2 de las actividades para hacer con tus gusanos de seda, hablo de cómo observarlos al microscopio. Tienes 3 propuestas para ver cosas alucinantes y videotutoriales para que te resulte sencillo encontrarlas.
¿Por qué andan tirando su cara los gusanos? ¿donde consigo más caras de gusanos? ¿qué otras cosas tiran por ahí y que más “se les ve”?
Los puedes comprar aquí:
Un minicurso de gusanos de seda por valor de 33 euros. Con vídeos y 6 actividades para observarlos mejor.
Un curso de gusanos de seda más “gordo” (110 euros), para hacerte un superexperto en gusanos, hacer proyectos en clase o en casa, observarlos microscópicamente…
El cuento:
Bombyx, el gusano de seda (castellano)
Bombyx, the silkworm (English)
Un abrazo
Txus, veterinaria científica
Look at the photo above.
It's the face of a silkworm.
The worm was alive. That face, let's say it was too small for him.
And he threw it around.
I found it by chance. I didn't know that worms also molted their faces. I saw a strange, tiny thing and I put it in my danioscope.
That photo appears in the story of Bombyx, the silkworm.
In fact, there are a lot of pictures I took last year.
All of them mine, original.
I took them after spending two months breeding worms and researching like crazy. Reading a lot of bibliography, contrasting everything I read, getting fascinated with the history of how a simple worm united east and west, a long time before the internet and globalization arrived, making timelapses of how the worms made the cocoons, thinking about how to explain this to the little ones...
All Villapez was full of worms of 4 different breeds, white, zebra, transparent, wild...
My danios were jealous, I know.
Anyway, I would tell you that I had a hard time, but I would be lying. I didn't struggle at all, it was such a cool thing to do that I just got caught up in it. I could stay for hours and hours... You know when you are fascinated by something that time does not pass?
To share that feeling and everything I learned, I translated what I saw into a course format. And this year I made the story.
You can buy them here:
The story: Bombyx, thesilkworm(Spanish)
Bombyx, the silkworm (English)
A hug
María, scientific veterinarian