No me gustan las redes sociales, me embotan la cabeza y me parecen una pérdida soberana de tiempo. Pero a veces, por ver que se cuece en el terreno educativo, les echo un ojo. El caso es que el año pasado hubo una cosa que me llamó mucho la atención.
Me enfado con un influencer
Me enfado con un influencer
Me enfado con un influencer
No me gustan las redes sociales, me embotan la cabeza y me parecen una pérdida soberana de tiempo. Pero a veces, por ver que se cuece en el terreno educativo, les echo un ojo. El caso es que el año pasado hubo una cosa que me llamó mucho la atención.