Gran idea de debate para clase
Sobre qué exigirle a tu pescatero
Ayer vino Juanillo.
Para que te hagas una idea de la importancia de Juanillo en tu vida, te diré que tú no estarías leyendo esta newsletter si no fuera por él. Porque Juanillo es la persona que me presentó a Danio. Cosas del efecto mariposa.
Bueno pues Juanillo ya no trabaja con Danios sino que se dedica a otra cosa que también te va a interesar porque puede ser un gran debate para clase.
Atiende, que me apuesto 10.000 huevos embrionados a que esto no lo sabías.
Ahora Juanillo trabaja para un grupo animalista, y se dedica a intentar que supermercados y piscifactorías cambien sus formas de producir para hacerlas más sensibles al bienestar animal.
A mí escuchar la palabra animalista me da como urticaria de entrada. Creo que les han sobrado películas de Disney y les han faltado capítulos de Rodriguez de la Fuente. Pienso que están convencidos de que los peces no tienen memoria y de que si te esfuerzas lo suficiente puedes convencer a un lince de que coma lechuga y no conejos. Confiemos en el impacto de Avatar en las nuevas generaciones.
Pero como persona curiosa, siempre me gustar escuchar los argumentos de la gente que a priori no comprendo, para intentar hacerme una opinión fundada y no basada en prejuicios. Y más estando Juanillo implicado.
Así que abrí las orejas.
Y lo que me contó lo identifiqué enseguida como tema de newsletter ya que era un debate para clase interesantísimo.
Y una causa justa que pelear.
He de advertirte como hacen en los telediarios de que lo que viene a ahora es duro de leer.
¿Te has planteado alguna vez cómo sacrifican a los peces en las piscifactorías?
Bueno pues los ponen en hielo y mueren ahogados. Sacar un pez del agua es el equivalente a que a tí te metan la cabeza en una bañera hasta que mueras. No es agradable.
Con el agravante de que la agonía se prolonga entre 5 y 40 minutos y los peces están amontonados unos encima de otros moviéndose bruscamente y no haciéndose precisamente cosquillas.
Y por si eres de la generación Disney, te aclararé que los peces sí tienen memoria, sí sienten dolor y su inteligencia es mucho más avanzada de lo que nos pensamos.
Después de leer esto no pretendo en absoluto que dejes de comer pescado. Te diré un secreto: eres un animal y eres omnívor@. ¿No necesitas comer pescado ni carne todos los días? seguramente no, pero excluirlos de la dieta no es algo para lo que estés biológicamente preparad@.
Bueno pues la lucha de Juanillo está en que las piscifactorías aturdan a los animales antes del sacrificio. Es decir, que les den una pequeña descarga eléctrica para que se mueran sin enterarse o al menos minimizando significativamente el sufrimiento.
Esto, por si lo desconocías, se lleva haciendo en mataderos de mamíferos desde hace mucho tiempo. Los mamíferos son animales que nos resultan más empáticos que los peces, supongo que porque se parecen más a nosotros, así que las legislaciones tienden a protegerlos más.
Además la carne de un animal que muere sin sufrir es mejor y se conserva más tiempo. Esto también pasa con el sacrificio de los peces aturdidos. Van a estar más ricos.
Por eso veo que esta causa que persigue mi amigo es algo importante de conseguir.
Y creo que el principal escollo a vencer para lograrlo es que la gente lo conozca, porque hay una enorme ignorancia social sobre esta problemática.
Yo soy veterinaria y no tenía ni idea de esta práctica.
Si la gente lo sabe, lo pide y está dispuesta a pagar unos céntimos más para comer un pescado más sabroso y que ha muerto dignamente, podremos cambiarlo.
Así que le presto mi pequeño altavoz.
Si esto lo leen casi 11.000 profesores y se debatiera en cada una de sus clases de 30 alumnos y estos a su vez lo contaran en sus familias, de una media de 4 personas, echando mano de la competencia matemática, me sale que podría tener un impacto de 1.320.000 personas.
Algo es.
Y dí que no te da para debatir: ¿qué dieta siguen tus alumn@s? ¿es lícito comer animales? ¿qué poder tiene un consumidor en cambiar lo que la industria lo ofrece? y por supuesto les puedes leer palabra por palabra el método de sacrificar a estos animales, a ver qué les parece.
Si quieres enseñar en clase cómo es un pez, pero cómo es de verdad, sin edulcorar pero sin mirar hacia otro lado, aquí tienes un proyecto que te ayuda a conseguirlo:
Un abrazo,
Txus, veterinaria omnivora y fan de Avatar.