¿Tú sabes eso de que cuando tienes un bebé ves carritos de bebés por todos sitios?
A mí desde luego me pasó y me sigue pasando: veo pitbulls, danios, coches eléctricos… todo en lo que “me meto” lo veo por todos lados.
Pues desde que hago curso online, también los veo en todos sitos.
Cada vez que voy a la panadería, a clases de cerámica, a entrenar a mi perra, a clases de pilates…
Pienso, ¿que hace esta gente que no está haciendo un curso online con lo que sabe hacer?
Pero mira, ayer se me escapo una posibilidad y vino mi amiga Ana a darme la idea. Ana estudió bellas artes y se dedicó a restaurar. Es la mamá de Javier, uno de mis “musos” de 6 añitos que sale mucho en esta newsletter.
Pues me dijo ayer cenando:
-Tía, cada vez que leo tu newsletter me dan ganas de hacer tu curso.
-Chica pues hazlo. Seguro que hay gente en el mundo que quiere aprender a restaurar cuadros, la mecedora de su abuela o lo que sea.
Bien visto Ana.
Revisa tu caso, si sabes hacer algo que haya otra persona en el mundo a la que le pueda interesar hacer lo que tú sabes hacer, igual te interesa este curso:
Curso de cómo hacer un curso (online)
En él te explico paso por paso, todo lo que necesitas saber para transformar tu conocimento en un curso online y subirlo a internet. De forma fácil y concisa y para que no tengas que perder miles de horas en averiguar cómo se hace esto (como tuve que hacer yo:
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47 euros (puedes reírte del precio si quieres. Durará unos días nada más, así que te aconsejo que lo compres rápido)
Un abrazo
Txus, emprendedora online.